viernes, 23 de octubre de 2015

Los hombres y el sexo


El otro día debatía junto a unos amigos un tema que me llama bastante la atención por lo absurdo que lo veo. En esta época donde el sexo no tradicional está mejor aceptado que antes, me resulta curioso como algunos hombres se niegan a ellos mismos y niegan a los demás. Sea cuales sean sus gustos sexuales, su orientación o sus fetiches, reaccionan de manera hipócrita ante estos temas.
Me relataban como no hacía mucho tiempo una amiga travesti que vive de manera abierta su condición tuvo un encuentro algo desagradable con un caballero en un club liberal donde acuden personas a las que les gusta este tipo de prácticas. Dicho caballero sabía perfectamente donde acudía y tuvo un breve encuentro con esta mujer travesti. Justo a la mitad del encuentro sexual el hombre de manera muy irrespetuosa y  grosera cortó dicho encuentro alegando que a él no le gustaban los hombres y que se largaba de allí. Y yo escuchando esto, pensé para mi misma, veo ilógico que dicho varón llegara primeramente hasta el local, continuara por tontear con la cross dresser y acabara teniendo intimidad con ella.
Seamos lógicos con nuestros actos y responsables con nuestras vidas. Todos somos libres de hacer y vivir como nos plazca siempre y cuando no dañemos a los demás.
Lo mismo pasa cuando llevamos esto mismo al BDSM a diario se ven casos de hombres que niegan pertenecer a este mundillo por que ya sea por su educación, su moral o sus perjuicios intentan engañarse a ellos mismos y engañarnos al resto cosa que me parece cuanto menos absurda.
Y aquí viene una breve anécdota que me ocurrió hace algún tiempo con un caballero de mediana edad el cual conocí en una de mis múltiples apariciones en fiestas y reuniones de la comunidad. El caballero me relataba que había acudido allí de manera casual y cuasi por equivocación. Cosa que por intuición no me creí y ahondando en aquella conversación acabó por confesar mas cosas de las que yo creí haber necesitado saber.
Dicho todo esto simplemente llego a una conclusión, ¡¡dejemos de engañarnos y disfrutemos la vida y la sexualidad que es maravillosa!!

¡Hasta la próxima semana, sed malos y portaros mal!

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